Ecografía transvaginal

Como sabemos, la ecografía transvaginal es una técnica que, igual que en el resto de ecografías que se pueden llevar a cabo a lo largo del embarazo, utiliza la tecnología de los ultrasonidos. Esta tecnología es totalmente inofensiva tanto para el bebé como para la salud de la madre, por lo que no existe riesgo de ningún tipo aunque el número de ecografías realizadas sea elevado.

En esta ecografía se introduce el ecógrafo en el interior de la vagina de la mujer, y por norma general, es la que se utiliza para realizar la confirmación del embarazo.

Gracias a la ecografía transvaginal es posible escuchar los latidos del feto a partir de la sexta o séptima semana de gestación, así como detectar de manera precoz problemas como saco gestacional vacío, embarazo ectópico,  placenta previa, cuello uterino corto, o cualquier otro problema que pueda afectar de una u otra manera al correcto desarrollo del embarazo.

¿Cuándo y cómo se hace la ecografía transvaginal?

Este tipo de ecografía se diferencia del resto de ecografías principalmente en que puede detectar la presencia de un embrión desde la etapa más temprana del embarazo. A partir de la segunda o tercera semana de gestación es muy probable que ya se pueda ver el saco gestacional.

Cuando vayas a tu centro médico para hacerte una ecografía transvaginal, recuerda acudir a él con ropa cómoda, ya que deberás desnudarte por completo de cintura hacia abajo.

Te acostarás sobre un sillón o camilla y el especialista médico introducirá en tu vagina una sonda previamente cubierta con un preservativo. Debes estar tranquila porque es un proceso totalmente indoloro, ya que siempre se utiliza un gel lubricante para producir las menores molestias posibles.

Una vez que la sonda se encuentre en el interior de la vagina, podrás comenzar a apreciar en la pantalla del ecógrafo el tamaño y la forma de tu bebé. Gracias a la eco transvaginal y a los modernos equipos con los que cuentan la mayoría de centros médicos, también existe la posibilidad de escuchar el latido del feto, así como de saber qué dimensiones tiene, con el único objetivo de conocer de primera mano si el tamaño del feto se corresponde con la semana de gestación en la que te encuentras en el momento de realizarte la ecografía.

Preparación para la ecografía transvaginal

Para la preparación de la ecografía transvaginal lo único que debes tener en cuenta es que debes estar tranquila, porque los nervios no ayudan de ninguna manera.

Por otro lado, te ayudará llevar al centro médico ropa holgada que te permita vestirte y desvestirte con facilidad.

En cuanto a si se debe acudir a la cita para la eco transvaginal en ayunas o no, no existe ninguna contraindicación ni problema de ningún tipo, ya que es una ecografía que es totalmente inofensiva tanto para ti como para el bebé que llevas en tu interior.

Precio de la ecografía transvaginal

Ante la impaciencia que muchas mujeres sienten sobre todo cuando se encuentran en su primer embarazo, muchas eligen la opción de acudir a un centro médico privado para realizar una primera ecografía. Hay que tener muy en cuenta que en las primeras semanas de embarazo, no se puede apreciar mucho más que la forma del feto, por lo que en ocasiones merece la pena esperar a la primera ecografía de la sanidad pública, que se lleva a cabo a lo largo de la séptima semana de gestación.

Si aun así decides acudir a un centro médico privado para realizarte una ecografía transvaginal, debes saber que, además del precio de la ecografía, es muy probable que te cobren por la consulta, por lo que su precio puede rondar desde los 80 hasta los 100€ con toda facilidad.

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